Rendición de Cuentas

View this page in English

Amigos de NGIM,

Quiero informarles los detalles sobre una decisión importante que tomé sobre nuestro ministerio NGIM. He estado orando y pidiendo sabiduría a Dios para determinar cómo NGIM y específicamente yo mismo como presidente podemos ser más responsables a la luz de las consecuencias de las revelaciones de RZIM.

Hay tres pasos que en NGIM vamos a tomar para ser más responsables ante aquellos que apoyan nuestro ministerio.

Primero, estoy autorizando a mi equipo a compartir con confianza cualquier inquietud que puedan tener sobre mí como presidente con un líder cristiano internacional que no está afiliado a NGIM. Él es un amigo y mentor mío que vive en el área y no es reacio de ninguna manera a confrontarme sobre cualquier tema relacionado con NGIM. Él y yo acordamos recientemente reunirnos al menos una vez al mes y él continuamente me da buenos consejos sobre mi vida y nuestro ministerio.

El segundo paso que estamos dando es ser más transparentes con nuestras finanzas. Es importante que nuestros donantes sepan que estamos siendo buenos administradores del dinero que nos confían. Entonces, a partir de ahora, cada trimestre, nuestro departamento de contabilidad enviará una lista de nuestros gastos a todos los miembros de la junta de NGIM.

El tercer paso es que pronto tendremos un lugar en nuestro sitio web en el que cualquiera podrá compartir alguna inquietud que tenga sobre cualquier persona conectada a NGIM. Sin embargo, solo aquellos que trabajan para NGIM podrán ver todas estas preocupaciones.

La conclusión es que el Señor ha puesto en mi corazón un compromiso renovado para construir defensas más fuertes en mi propia vida, así como en las vidas de aquellos asociados con NGIM, para rendir cuentas a aquellos que apoyan nuestro ministerio.

¡Es por ello que en NGIM también estamos comprometidos a enseñar a las personas cómo practicar nuestra tarea apologética (1 Pedro 3:15) de una manera diferente! Es por eso que en NGIM estamos comprometidos a enseñar los principios del discipulado en asociación con nuestro entrenamiento apologético y evangelístico. Solo recuerde, como dijo mi padre: 

“Si defendemos el Evangelio con la mente, pero traicionamos el Evangelio con nuestra vida, la mayor defensa intelectual del Evangelio se derrumbará”. 

No debemos construir seguidores de Cristo que tienen las herramientas, pero carecen del carácter para representarlo. ¡Nuestro propio testimonio a los demás puede depender de ello!

Confío en que esta actualización y las ideas que he compartido lo alentarán de alguna manera. Gracias por su continuo compromiso en oración y apoyo a NGIM. Nos estás ayudando a hacer una diferencia eterna.

Su Sirviente,

 

David Geisler